.Entre luces rojas

No sé cómo se llama ni qué forma tiene. Es el regalo que le da la vida a los que saben ver más allá de lo obvio; a los que no se conforman solo con mirar, a los que el mundo entero les sabe a poco. A los que bailan, a los que viven bonito, a los que ponen buena cara y hacen que el tiempo huela distinto. A los que no se tienen miedo, se apasionan, lloran, ríen y se enamoran.

Se muestran, son y se dejan ser; te muestran, son y te dejan ser.

Encontramos razón en el absurdo, nos hicimos parte de ello e imaginamos mundos nuevos para hacerlo más bello. Bailamos, lo hicimos bonito, pusimos buena cara incluso cuando nos faltaba la mitad e hicimos en seis meses lo que se puede tardar toda una vida en encontrar.

Entre el arte que tuvimos para volvernos locos perdimos el miedo a ganar y dejamos correr las pasiones entre luces rojas mientras la vida pasaba por nosotros y nos convertía en parte de las grandes cosas.

Hasta siempre.