.Al ritmo de un baile de clown

  Las noches en vela me las guardo para cumplir sueños pendientes, pero a veces te sorprenden historias nuevas saliendo de tus párpados y aligerando el peso que les piden, por favor, que caigan y zanjen lo que el caos se trae entre manos. Tamborileando en un flexo al ritmo del escenario paralelo que me imagino caigo, arrítmico, en un trance de derrotas que me invento mientras mi intolerancia a las sorpresas gana terreno a lo aleatorio de la sinergia. Y no me dejo llevar.

  Son respuestas al ritmo de un baile de clown con los pies en línea, son signos, son abrazos distintos con un minuto de distancia, es la dicotomía de la que se alimentan mis renglones cada día. Pero también es la certeza de que el tiempo no vino de visita para controlarlo, así que si sólo quedan silencios para mis preguntas, borraremos por omisión los dobles sentidos que tejí en mi edredón y guardaré los abrazos en canciones.

  Esas, por lo menos, calientan el alma.