.Magia
Ayer me releía. En un afán por conocerme un poco más volví las páginas de uno de los trances más bellos que viví.
El eterno desafío del papel en blanco, del silencio, de la primera vez. La incertidumbre, las dudas, las mil preguntas, el ansia por anticipar la incógnita, el ansia por conocer.
Perder el control en virtud de la imperfección
Dejarte querer. Hagamos Magia. Ser preso de la vibra, del ritmo, del alma, y ver cómo de repente todo, todo, todo encaja. Ir más allá del sentir y pasar a formar parte de uno de los mayores milagros que te puede regalar este mundo. Volverte aire y perturbarte con las cuerdas, rebotar entre maderas, saltar a tus pulmones, deslizarse por un tobogán brillante con el reflejo de doce estrellas, saltar y estallar en un aullido que vibra en consonancia de todas nuestras alegrías, dudas, miedos e ilusiones.
Dejarte querer por las leyes del caos...
Entonces cerrar los ojos y dejarte envolver del aura de la velada. Que pueden matar al tiempo ahora mismo que yo me quedo gustoso preso de la muerte de nuestro mutismo.
...y caer porque te explota el alma.
Dos copas más. Sólo si son excusa de volver a la vida poco a poco mientras te escucho suspirar.
